OVNIS: El desencanto del encantado, o al revés. (Primera parte)

Quizás éste tema no sea presizamente científico, debido a la ausencia de datos, o quizás sí, debido a el gran número de hipótesis existentes entre los humanos.
Un hecho que no podemos negar, es que cada vez menos, el secreto a voces se hace público con los medios de comunicación.

Teoría conspiracionista, o civilizaciones turistas por la Tierra? Aquí hablaremos de la segunda.

Desde la mitad de mi dualidad existencial, mi uno es muy curioso, factor que lo llevó a la ciencia, las preguntas y las respuestas con experimentación; pero el otro, rezagado debajo de las manos del científico, grita sordamente la existencia de una realidad planetaria distinta a la ordinaria. Es ahí, cuando ante la falta de datos e hipótesis válidas, uno se queda perplejo al admirar con fascinación las grandezas del espacio, al menos las que el ojo humano puede ver a simple vista.

Una estrella más, moviéndose en línea recta a una velocidad más rápida que cualquier nave terrícola, pero menos que la que genera un astro en movimiento, un cometa, una centella... una estrella fugaz.

Y como si leyendo nuestros pensamientos estuviera... huyó al pimer intento nuestro de captar la grandeza de su irregularidad. Huyó; huyó dejando una estela naranja, azúl y otra más de color verde, huyó de menos a más. Huyó dejando una sensación de "tranquilo, aquí estamos...", dejando una sensación que desaparecía con las horas.

Y a veces, el otro, el singular de mi dualidad, el rezagado, me recuerda: "Ahí están, quizás puedan ayudar..." Y cómo no pensar eso, si cuando vemos que el planeta en el que vivimos se extingue, poco a poco, lo extinguimos, poco a mucho. Cómo no pensar que la ayuda vendrá de las estrellas, cuando vemos que no hay solución aquí.

Luces de la ciudad empotrada en una sierra, luces que se despegan volando en formas musicales dejando al ojo humano atónito. Que desparecen cuando queremos captarlas mediante un dispositivo fotográfico inventado por nosotros, los primitivos. Se van.

Pensando un poco como lo hacían Stephen Hawking, Arthur Clarke y Carl Sagan...

-Si quisieran haber atacado, ya lo habrían hecho. Al menos así funciona nuestra lógica humana, quizás ellos, no piensen de la misma forma en que nosotros.

- Les quisimos hacer saber que aquí estamos, mediante objetos lanzados al espacio intencionalmente, mediante transmisiones de ondas de radio. Actitud curiosa, típica del hombre, sin medir las consecuencias de sus actos, lo ha hecho con su planeta, dejándolo morir a causa de la comodidad. Ahora nos queda poco espacio para vivir. Mandando señales a otras posibles civilizaciones, a ver qué pasa...

Seres extraños, abducciones, dibujos en los campos, películas, libros... Todo mundo habla de ésto, una historia original y similar, puede repetirse con otra aislada de la fuente de la primera, y con otra y con otra y con miles, quizás sea cierto, o quizás sea como Cristo, del que todos hablan y tampoco sabemos si es tangible, o quizás un arma política dirían los conspiracionistas. Todo es válido, quizás algún día sabremos la verdad, quizá la veamos nosotros en ésta generación.

Quizás el proyecto SETI realmente estaba encaminado. La mayor incursión de la humanidad, la búsqueda de vida extraterrestre es posible en la actualidad, búsqueda de vida orgánica en Marte, quizá el próximo telón que se levantará en la historia del hombre; quizá el último, quizá el primero de muchos más...

Un abrazo...
M.A.